En esta ocasión nos ponemos en contacto con Pedro J. Monge, con el que charlamos para nuestra sección de entrevistas. Es uno de los guitarristas más importantes del metal nacional, además de fundador, compositor, productor y líder de Vhäldemar, el grupo de heavy metal fundado en Baracaldo a finales de los 90, y que sin duda es una de las bandas más importantes del panorama metalero nacional. Sentimos decir que no pudimos completar toda la entrevista debido a un problema técnico, pero también hemos quedado de volver a charlar en un futuro no muy lejano.
Pedro,
te agradecemos que saques tiempo para brindarnos la oportunidad de charlar
contigo esta tarde. La primera pregunta y más obvia, pero no menos importante,
es ¿quién es Pedro J. Monge y cómo empiezas en este mundo de la música y formar
una banda junto a Carlos Escudero?
Hola a esa gente. Saludos ahí a toda la gente. Hola, Alberto y Oscar.
Todo esto empieza cuando era
chaval y gracias a mi hermano, él me sacaba ya 4 o 5 años, y siempre andaba con
las guitarras, sus CDs, las casetes y eso. Ahí es cuando le cojo el gusto a la
música y en especial con el rock, el metal. Empezamos intentando tocar
canciones de Jimi Hendrix, de Deep Purple y poco a poco vas descubriendo otras
bandas, los Judas, Iron Maiden, etc. Ahí empezó toda mi obsesión, cuando
escuchaba todas estas canciones ya me imaginaba en el escenario, soñaba con
eso. Poco a poco se me fue dando bien la guitarra y empecé a practicar horas y
horas y horas. Empecé a meterme en locales de música con otros músicos, y ahí
fue cuando ya conocí a Carlos. Al principio tocaba con mi hermano, blues y
cosas así, hacíamos sesiones, jams y todo eso. En un concierto de su grupo
anterior, fuimos a verle y le conocí ahí. Después de recoger todos los trastos,
me lanzó un grito, él era guitarrista, no era cantante en esa época, y lanzó un
grito, pero como si fuera Eric Adams, igual, igual que Manowar. Me llegó al
alma y fui donde le dije: “oye, tú, tú vas a ser mi cantante”. Él respondió: “¿Cómo
qué? ¿Qué dices tú?” También estaban en el local de al lado, y ya nos empezamos
a reunir, les enseñé mis ideas, y de ahí sacamos nuestra primera demo, que eran
cuatro temas, si mal no recuerdo, y a partir de ahí, pues ya sabéis, pues
veinti... no sé cuántos años que llevamos juntos, vamos, más que en mi
matrimonio.
Hablas
del apoyo de tu hermano para iniciarte en este mundo, además de tu hermano,
¿alguien más de tu familia te ha apoyado?
Sí, mi padre, desde que yo recuerdo
siempre había una guitarra española por casa, él tocaba cuatro acordillos, él
tampoco se metió muy de lleno, pero sí que me orientó para apuntarme en el
conservatorio, hice estudios de guitarra clásica, que al principio iba súper
renegado, yo sólo quería mi guitarra eléctrica, mi heavy metal y mi rollo, pero
ahora lo agradezco, porque al final tienes un conocimiento más claro de la
teoría y que la verdad que viene bien, adelantas. No digo que sea
imprescindible porque al final la música es alma y sentimiento, puedes
perfectamente hacerlo sin ello, pero es una herramienta que te va a llevar a
hacer las cosas con un conocimiento más rápido, no tienes que buscar. Ya sabes
de cabeza, este acorde es así, esto hay que armonizar así, eso ya te viene. Gracias
a mi padre es verdad que estudié guitarra clásica y también descubres cosas. De
hecho en Vhäldemar me gusta mucho meter cosas clásicas de Bach, de Vivaldi y
gracias a toda esta formación, también se nota
Muchas
veces yo viéndoos, escuchándoos a mi memoria siempre me vienen muchos riffs de
por detrás de esa época clásica de tus primeros discos.
Yo creo que Yngwie también inspiró mucho en estos clásicos y es evidente todo el sentimiento de estos compositores en su música. Siempre me gusta que suene rock, duro y esa vieja escuela de Dio, por ejemplo, pero sí que es cierto que si hay que meter un pasaje que recuerde un poquito a este aire clásico, a mí me encanta y soy súper fan de Yngwie, le he escuchado muchísimo, he tocado muchas de sus canciones, siempre que he podido he ido a verlo.
Ha hecho obras maestras. Sí que
es verdad que ahora le he perdido un poco la pista, porque no recuerdo muy bien
ya en qué LP, pues no sé si por él o por sus cosas de producción, ya no me
gustaban mucho como suenan sus discos, ya no pilla cantantes top, o canta él,
le he perdido la pista, pero no en directo, si viene en directo seguiré yendo a
verlo, porque es increíble, pero sí que es verdad que sucede desde ahora, pues
joder es una pena que un genio como él, no sea capaz de ir dando un buen
productor o coger músicos excepcionales, no sé, él sabrá y sus cosas tendrá.
Coincido
contigo, me pasa como a ti, yo sus primeros cuatro o cinco discos, a mí la
mente me la tenía absorbida, yo en la época de adolescencia en el instituto, yo
llevaba la carpeta forrada con fotos de él, para mí era un dios de la guitarra,
y luego sí es cierto que a partir del quinto o sexto álbum, me pasa un poco lo
mismo.
Es una máquina de componer, y luego la técnica y su expresividad en la guitarra son únicas. Hay muchos guitarristas que corren, pero ese feeling que tiene, no es que intente hacer, pero sí que comparto esa sensación de ese sonido Stratocaster que nace de Jimmi Hendrix y Richie Blackmore. Lo he mamado tanto de Yngwie que incluso llevaba la misma guitarra. Ahora sí que he cambiado de guitarra, quizás hasta por no parecerme tanto. No sé si tampoco quería que sea un cliché de él.
Mira,
el Yngwie de Baracaldo.
Pues no, no quería eso tampoco.
Pero coja la guitarra que coja me hago sonar a ese aire, porque ya te digo que Yngwie
es un eslabón más, me flipa mucho Rory Gallagher, que también era de
Stratocaster, Jimmy, Richie Blackmore, para mí es ese sonido lo que busco, ese strato
rasgado, ese vibrato fuerte y esas escalas, pues claro me encanta. Pero no es
correr por correr, Yngwie corre cuando hay que correr y cuando hay sentimiento
su vibrato es demoledor, arrolla a cualquier guitarrista.
Coincido,
para mí es un maestro, siempre lo será, lo llevaré de corazón, porque es mi
primer idioma.
En
este punto yo me callo, porque...
No digo que no haya más guitarristas,
yo soy fan de muchos y me encantan, Vinnie Moore, por ejemplo, hace poco lo he
estado viendo aquí en Bilbao y es de mis guitarristas favoritos Michael Romeo,
Steve Vai… Pero me los imagino a todos en el escenario y si saldría Yngwie yo
creo que les reventaría a todos con dos notas, para mí es lo más que hay. No
obstante, ya te digo, soy muy fan de los demás
No digo que sean unos pelagatos pero a mí me supera y siempre me ha superado. Yo me quedé creo que Rising Force, no, el Trilogy.
Bueno, la primera canción, que es
la de Rising Force, en mi opinión, es el mejor solo de la historia, estoy
enganchado. De hecho esa canción es la que me hizo flipar con el duelo de
teclistas y por eso incorporamos hace 15 años a la banda, incorporé a un
teclista, porque yo quería eso, hacer un solo y que me responda el teclista,
volver y tal y a raíz de esa canción fue cuando escuché ese solo.
Hablábamos
de tus comienzos en la niñez y del apoyo familiar. Es muy importante el apoyo
que has tenido.
Sí, claro, al final es donde te
guían y si tu padre o tu hermano ya tocan y te orientan en este camino, lo
tienes más fácil. También es que te guste y te llegue al alma, a mí es lo que
me pasó, No quería hacer otra cosa. Es guitarra, guitarra, guitarra, es como
una obsesión. A día de hoy, estoy entre guitarras, si lo veis allí, o sea,
guitarras por aquí, guitarras por ahí. Eso que este es el estudio que tengo en
Bilbao, que es un poco más de donde se trabaja con las bandas. Luego tengo otro
estudio donde yo vivo, igual tengo 30 o 40 guitarras. Es donde acabo los
trabajos de los grupos que grabamos, hay guitarras, amplificadores, pedales, y
al final es mi vida y mis herramientas de trabajo.
Comentabas
que de niño ya lo tenías claro, que tenías esto por dentro y querías dedicarte
a la música, pero ¿alguna vez pensaste realmente en llegar al punto en el que
realmente se os puede situar ahora a ti, a lo que es la banda?
Cuando eres un chaval sueñas con
eso y no sabes hasta dónde vas a llegar, pero sí que es verdad que tuvimos no
sé, suerte o qué. Con nuestro primer LP ya salimos, no habíamos tocado ni en un
bar, fue ya directamente en la Aqualum con 600, 700 tíos, fue de repente, en el
primer concierto, el sueño es una realidad. Sí que hemos tocado en festivales
para muchísima más gente, pero a nombre nuestro somos una banda que eso, pues
es 300/400, es un logro, más en este país. Ya sabéis que el heavy metal, está
que si no son grandes festivales, un grupo fuerte incluso, hay conciertos que he
metido yo más gente que los Rage, imagínate, y no lo digo por flipármela, que
es que es verídico, y te quiero decir que para nosotros es un orgullo estar
haciendo giras y meter gente y decir lo hemos conseguido. No hemos conseguido
tocar para 14.000 a nuestro nombre, pero yo creo que pocos grupos heavy lo van
a conseguir. Entonces, en nuestro nivel y en nuestra música underground, yo
estoy súper contento y súper feliz. Y luego en mi opinión, lo hemos conseguido.
Nos somos Iron Maiden, pero está bien.
¿Por
qué la guitarra eléctrica y qué te influenció para decantarte por este
instrumento?
Había una guitarra española en casa y es que la que cogía, me inventaba canciones sin saber nada, aunque fuera con las cuerdas al aire, fue como una obsesión, me llegó y ya fue escuchar los riffs como ‘Smoke on the water’, que eran cuatro notillas, y todo el rato con la cinta para atrás, para adelante, sacarlo. Luego ya fue a más un poquito a más, con Joe Satriani flipé un montón, con Steve Vai, pero te hablo de largas horas. Encima en esa época era difícil conseguir tablaturas, entonces era todo a oído, echar para atrás, rebobinar, rebobinar. Recuerdo que conseguí una pedalerita que grababa cachitos y podías ponerlo lento, te hablo del ’90, con 10/11 años. Sacando cachitos del ‘Passion for Warfare’ de Steve Vai, de Yngwie, yo lo recuerdo súper entrañable porque realmente disfrutaba de meter esas horas con el instrumento, que era la guitarra. Ahora claro que meto horas, pero ya no es lo de antes, de esa obsesión. Lo que has mamado de pequeño, ahora es como andar en bicicleta, que dicen que no se olvida. Sí que es verdad que hay que mantener, porque tampoco te puedes hacer una maratón o algo si no has practicado, pero las horas de chaval es lo que te va a marcar tu estilo.
¿Y qué te dicen en casa? Pedro, para ya con la
guitarra.
Ahora vivo con mi mujer y mis dos
hijas y tengo el estudio pegado, que mismamente ayer, me hizo falta una
colaboración de mi hija a las 11 de la noche, llamé a la mujer, que se asome a
la ventana, por favor y con el micrófono le grabé un par de frases. Vivo pegado,
pero en casa sí que es verdad que ya no tengo las guitarras, mi mujer es muy
maniática de decoración y no me deja poner guitarras en las paredes, pero bueno
tengo el estudio pegado, que a veces voy en pijama por la calle y me meto al
estudio así. Hoy me he venido a Bilbao y me he venido con mi guitarra, la que
me gusta para practicar y tal y siempre voy pegado a una guitarra.
¿Cuántas
horas le dedicas a diario a la práctica?
Me gustaría practicar más, pero al
final ya sabes, la familia, tus hijas. Tengo hijas pequeñitas que quiero
disfrutarlas mucho. Supongo que cuando ya se hagan mayores y se vayan por ahí
volveré a meter más horas, pero ahora sí que me gustaría meter más de lo que
meto; trabajo mucho para otros grupos de compositor, producción, masterización,
mezcla, todo esto, pero fíjate que estoy haciendo grupos y tengo mi guitarra
colgada, a veces el ordenador tiene que trabajar unos minutos, pues ya practico
y me gusta mucho ponerme bases o mi disco y tocar por encima e improvisar, sí que
siempre intento sacar por lo menos una o dos horitas para la guitarra. Sí me encantaría
poder más; y luego en la época de composición de los discos y grabación, ahí
meto ocho o diez horas al día, o lo que haga falta durante ese año, de unos
meses que dura este proceso de composición, grabación. La verdad es que luego
en los ensayos, que no hacemos tantos y ahora vivo alejado del grupo y es un
poco más complicado. Pero tenemos muchos conciertos, así que al final todos los
conciertos que hacemos, sirven de ensayo y lo llevamos súper machacado. Creo
que la gente lo nota en el directo como le metemos bien de caña.
Ahora hemos hecho muchísimos
bolos y estamos muy compenetrados, encima esta banda ya llevamos bastantes años
todos juntos, que antes siempre hemos estado que si el batería se va y viene
otro, y ya llevamos unos años tanto teclista, bajista, y Carlos y yo siempre
hemos estado desde el primer disco hasta ahora y por fin tenemos una banda muy
consolidada, que estoy súper contento con cada uno de ellos.
Siempre
dices en los conciertos que gran parte es gracias a Carlos, siempre los
recalcas que gracias a él la banda continúa.
Mi labor es que siempre haya
material nuevo, los discos, todo ese rollo, pero Carlos se encarga de todo,
este día aquí, la furgoneta, la organización, el merchandising. Y luego la
energía que tiene él al salir al escenario. Creo que si Carlos ahora me dice: Oye,
Pedro, que voy a dejarlo, que soy mayor o cualquier historia que me pueda
contar, tengo mis dudas de que yo cogería a otro cantante y saldría a un
escenario. Igual con otro proyecto, otra historia, pero como Vhäldemar no. Creo
que él es un 50% como yo otro 50%, porque al final es mi música y mi rollo,
pero toda la gente que va a los conciertos, al final, se queda con él, su show,
que es más bestia que... Yo creo que él es una parte muy muy importante de Vhäldemar
y creo que no me atrevería a salir con otro cantante. Tampoco voy a escupirme y
de repente no va a ser que lo caiga, pero no creo que se diera el caso.
Aparte
de la guitarra, ¿tocas algún otro instrumento? te hemos visto como bajista.
En algún caso sí. En mis
producciones y cosas de gente que me pide que les haga discos, hago todo yo,
puedo tocar tanto piano, bajo, batería a un nivel muy bajito. Sí que sé lo que
hay que tocar, por eso con mis máquinas y mis rollos sí que puedo llegar a
hacerlo. No podría interpretarlo, por supuesto que no. Pero bueno, bajo,
batería, mis coros, mis rollos también hago. Sí que me gustaría dominar un
poquito más el piano y la batería. Piano he estudiado también mis cuatro años,
pero no da para nada. Como no le metas horas. Y claro, me encanta tanto la
guitarra que nunca veo el momento. Tengo una batería montada también, pero es
lo que dices: si me llamó la guitarra es lo que me llamó. Me defiendo con el
bajo bastante bien en mi estilo, pero luego no me pongas a tocar jazz o tocar
cosas, creo que estoy especializado en rock, blues y heavy metal y considero
que lo controlo bastante.
Además
eres productor musical. ¿En qué momento decides dar ese paso?
De eso tengo una anécdota. De siempre, en el local querías grabar tus ideas, porque antes componíamos de memoria. O sea, pillamos la guitarra y chiquichiquichiqui, este viene con este riff, ahora viene el otro, a ver Carlos canta. Pues no era la manera, era bonito trabajar así, de memoria, recordar. Un buen día, mi hermano, que falleció, por cierto, hace un par de años, es una pena el hombre, nos dejó rápido. Compró un cuatro pistas, y ahí empezó todo, empezar a grabar con él, una guitarra, poder grabarme encima, y otra vez. Luego me acuerdo que hacías de tres pistas a una, tenías otra vez tres libres. Y todo esto empezó ahí, pero un día alguien de Cáceres nos invitó a grabar una canción de Barón Rojo, una cover que elegimos, la de Breakthoven, porque era la que tenía ese inicio de Beethoven, y me llamaba mucho a mí. Fuimos a conocer a Carlos Creator que era un productor de aquí muy bueno, me acuerdo que quedé solo con él, y fue llegar a su estudio, lo encendió, sonó el bombo ese que me puso ahí, fue una locura que me llegó al alma también como la guitarra, y ese mismo día le dije: Carlos, yo necesito esto en mi local, que me expliques; y me vio tanta ansia que me puso a trabajar con él. Estuve siete años con él, trabajando en los Rock Studios, y ya de siete años me vi con los conocimientos. Al final fue hacer la universidad con él, trabajando y cobrando. Por una parte muy bien, pero por otra parte mal, en referencia a mi música, porque ya te pones a trabajar muchas horas con otros grupos. De hecho eso fue entre el segundo y tercer disco que hubo unos siete años para sacar el siguiente disco. Por esa razón me metí a trabajar y muchas horas de música y vas dejando de lado lo tuyo y es una pena. Pero bueno, ahí empezó toda mi afición hasta que conseguí montarme en mi propio estudio, los Chromatic City Studios, y me vi capaz de lograr hacer producciones guapas a otros grupos.
¿Con
qué grupos trabajas ahora mismo? ¿Qué grupos tienes?
Ahora mismo, acabo de grabar a
Itinerum, que es un grupo que les ayudo bastante a la composición. Es un grupo
de Durango. Llevan su segundo LP, este es el segundo. Estoy mezclando a un
grupo más punk, Kayuko. He acabado con Segismundo y Toxicómano, también punk,
de Vitoria. Tengo una lista tremenda, tendría que sacar el móvil para verlo. Estoy
con Rise to Fall ahora mismo haciendo su quinto o sexto disco. A veces tengo que coger el móvil, que tengo la
carpeta de bandas y hay una lista grande. Sí que ando con algo más pero bueno
más o menos eso es lo que se está grabando.
Si Carlos
decidiera dejarlo, a lo mejor no serías capaz de continuar con la banda. ¿En
ese aspecto habrá algún día un disco en solitario tuyo?
Sí. A ver, me está pasando eso, que no me da la
vida para tanto, pero tengo ya alguna cosa que sí que me gustaría hacer con
diferentes cantantes. Por ejemplo, toda esta idea la empecé cuando Raúl, mi
bajista de ahora, nos cantó una canción en el anterior disco, Straight to Hell,
‘Fear’, que era composición suya. Yo sí que arreglé, produje todo y me dejó
loco cómo cantaba este hombre, ahí empecé yo un poco a rondar, voy a empezar a
hacer canciones. Mi mujer es cantante también, pues me canta una mi mujer, me
canta Raúl otra, conseguir cantantes por ahí, y esa fue la idea, pero se me va,
porque ahora he empezado y ya estoy componiendo otra vez para Vhäldemar, sé que
otro año se me va a retrasar esta idea, me gustaría que fuera ya, pero no sé, hay
que esperar. Pero no tanto instrumental, va a ser un disco cantado, igual si meto
un tema o dos instrumentales que tengo en mente también, pero la idea es que
sea un disco cantado. Con mis ideas, otras diferentes, no encasillarme en lo que
es Vhäldemar. Poder pintar como sea y que salga lo que salga, y que nadie me
tenga que decir nada.
En Vhäldemar también hago lo que
quiero, pero siempre estás encasillado en un estilo, que es super heavy metal,
y me gustaría alguna pincelada diferente, pero a ver si llega algún día.
Sí, y
lo esperaremos ansiosos para descubrirlo. Vamos a hablar un poco de Vhäldemar.
Hay dos palabras que, para nosotros definen perfectamente a la banda, que sería
heavy metal y el público que tanto sigue en legiones por miles en todas partes,
que se relaciona claramente con vosotros, y lo de la frase de ‘a muerte’, eso
es un eslogan que lleváis por bandera. ¿Qué se siente cada vez que alguien se
te cruza por la calle o estás en un concierto y te dice, ‘a muerte’?
Sí, la verdad que es una
sensación, vayas a donde vayas. Hay conciertos que voy a ver que es que no
puedo ni verlos, ni me dejan porque hay fotos y no sé qué. Digo, pero estamos
viendo a Udo o estamos viendo a no sé qué, pero disfrútalo. La gente se
emociona, la verdad que nuestros son fans muy, muy, muy fans y se ve que lo
flipan y claro, luego te ven y quieren hablar: “¿te acuerdas que te vi? no sé
dónde”, y al final somos una gran familia, y que sepan todos que yo me acuerdo
de toda la gente, no te puedo decir los nombres, pero joder, sé que, estos son
de los de Castellón, estos son los de Alicante, esta gente son los de Madrid y
es una pasada y sobre todo en algún festival, que vamos a verlo y joder, entonces ahí te reúnes con casi
toda España y de todos los conciertos que has hecho y es una pasada, la peña te
saluda y saben que somos gente de puta madre y por eso vienen porque les damos fotos,
firmas, lo que quieran, púas. Estoy de dar púas que desde que empezamos los
conciertos de la primera canción a la última damos una púa. Pero porque saben
que somos gente de puta madre y como sé que hay que dar 300 púas, pues se les
da 300 púas. La verdad que la sensación es de ser querido por gente y es algo
muy grande.
Desde un
principio, las letras fueron en inglés. ¿Tenías claro siempre este tema de
cantar en inglés?
Sí, lo hemos tenido muy claro,
porque al final, fíjate qué grupos estoy diciendo: Deep Purple, Yngwie, Iron
Maiden, Manowar, cantan en inglés. Entonces es lo que yo concibo como mi
música. Cantar en castellano es que me cambia tanto. No critico ni mucho menos,
no quiero decir ni peor ni mejor, pero no es lo que a mí me gusta. Yo escucho
mis canciones, y creo que si las cantáramos en castellano, se desvirtúan
totalmente para lo que yo tengo en mi cabeza, que es como tiene que sonar. Yo
creo que el heavy metal es como escuchar flamenco en euskera, imagínate. Igual el
que haya escuchado sólo eso, pues igual le gusta. Pero si has escuchado a
Camarón, pues tú lo que entiendes por esa música es cantar en castellano. Pues
a mí con el heavy metal me pasa que lo que me gusta es en inglés. Es lo que me
llena y yo por eso quise hacerlo así también. Es para sonar a ese estilo de
heavy metal, pues anglosajón, con palabras fuertes, monosílabas, y es lo que me
gusta. Hay bandas en castellano que son la polla y hacen muy bien, pero no me
llegan, a mí no me...
Claro,
cada uno elige como quiera hacer cosas. Vuestro último álbum, ‘Santuary of
Death’, publicado en el 24. Sólo se puede decir de este disco que es un
hostiazo de Heavy Metal en toda regla ¿qué nos puedes decir del gran éxito y de
las grandes críticas cosechadas por el disco?
La verdad es que es un orgullo hacer
un trabajo y de repente ver que tiene esta esta crítica tan buena y yo estoy
súper contento con este último disco. Siempre es un reto de sacar un nuevo
disco y cuando vienes de algo que te están poniendo que es súper bueno, el
siguiente que saques siga con mejores críticas y llega más gente, la verdad que
es una pasada, yo estoy súper contento, este disco me ha encantado está repleto
de temas. Es un disco que me costó al principio, hice solo una canción y luego,
con la siguiente canción pasaron meses y nada, pero de repente un día, no sé
qué pasó, me llegó la inspiración de no sé dónde, y lo hice seguido, en siete
días compuse todas las canciones, toqué los riffs, los solos, me puse a cantar,
yo suelo cantarlo en los discos, luego suelo pasar a Carlos y él saca las
letras, yo canto en mi improvisación en inglés, y fue improvisado todas las
melodías y todo se quedó tal cual, es que me ha salido del alma y por eso yo
creo que es un disco así de bueno, porque es como muy fluido, muy improvisado y
fresco. Creo que es la expresión que tienes tú a la primera, no preparar nada,
sino a la primera. ¿Qué cantarías aquí? eso es lo que pasó y estoy muy contento,
a día de hoy me lo pincho y flipo con él, o sea que está muy bien.
¿Ahora
en qué momento está en qué momento está la banda? ¿Qué planes de futuro
inmediato?
El futuro inmediato es el 29 de
mayo que vamos a proyectar nuestro primer directo oficial. Vamos a lanzarlo
bien editado, y lo vamos a proyectar en una sala de Bilbao, Bilborock, donde
por primicia podrán adquirirlo doble CD y un pendrive con su carátula para
verlo en vídeo.
Este es el primer proyecto que
tenemos ya a la vista. Es el 20 aniversario que grabamos en una sala aquí en Baracaldo,
que se llama BEC, y fue un éxito total. Metimos más de mil personas y fue
increíble. Creo que a la gente le va a gustar el directo, suena muy bien, lo
hemos mezclado aquí en los estudios y creo que el resultado ha sido bestial.
El siguiente paso que vamos a dar,
que ya te he comentado antes, es que estoy componiendo ya un nuevo disco. Por
ahora solo tengo dos temas y de uno de ellos haremos videoclip y lo lanzaremos lo
antes posible. Y luego para 2026, antes de verano, intentaré tenerlo editado, a
ver si hay suerte. No lo quiero decir abiertamente como que oficial, pero ya
sabes que esto de la música a veces, pues igual pasa otro año más o vete a
saber. Pero mi misión sí que es ir un poco más seguido, quiero meterle caña. Ahora
estamos en un punto muy bueno y no quiero que se me duerma la gente y tampoco
agobiar con un disco al año tal, pero sí que es verdad que me gustaría cada dos
años tener un disco, y a ver también lo que aguantamos. El cantante, Carlos, siempre
dice: “me quedan dos años buenos”. Y yo que no, Carlos, hay que darle. Yo sí
que soy de los que cuando vea que flojeamos, él, yo o quien sea, no pretendo, nuestra
música es muy fuerte, quiero decir que estar en esta música con 70 años, le
damos mucha caña, vamos muy rápidos, muchos solos. No es como salir a tocar
cuatro riffs de rock, igual la edad te lo permite. No creo que Carlos pueda
cantar esos gritos todo el rato, tirarse, subirse para aquí y para allá, ya
cuando veamos que es un poco lamentable el show que hagamos, no seguiremos. No
creo que seamos como estas leyendas que siguen y siguen. Yo es verdad que he
visto cosas que ya digo: “por favor, tío, retiraros ya y dejad bien lo que
habéis hecho”. Pero también son libres de hacer lo que quieran y para adelante.
Y en
directo, venís de hacer una gira bastante larga ¿Va a continuar? ¿O ahora ya el
tema directo está aparcado un poquito hasta que salga el nuevo lanzamiento?
¿Y
Europa o Latinoamérica?
A ver sí que recibimos ofertas, pero
una cosa por otra pues no acaban surgiendo. Los componentes de la banda trabajan
de sus rollos, es complicado. Hemos hecho una gira en Japón y es complejo, no
es tan fácil, hay muchas cosas que atar, muchos gastos, días en el trabajo de
la gente. Es complicado dar ese salto de decir: venga estamos solo por y para.
Es complicado. Y luego de dar con buenas productoras de conciertos, que no te
la líen por ahí. Hay que tener todo muy atado. Pero por Europa sí que hemos
hecho cosas, también hemos tocado conciertos por ahí sueltos, pero no como gira
seguida, eso todavía no nos hemos organizado ninguna así seria.
Sin duda, estamos cinco
individuos que cada uno por independiente son muy buenos todos y la
compenetración que tenemos, de tantos años ya y tantos bolos juntos, sabemos
todo lo que va a surgir. Individualmente, Raúl es un bajista excepcional y
cantante, Jonkol es un teclista abismal, Jandro va a muerte con la batería. Creo
que es el momento de esta consolidación de esta banda, es el mejor momento que
ha habido, sin duda alguna. Creo que en estos siete años que hemos estado
juntos, se nota, y están muy contentos también con nosotros. Al final Vhäldemar
quizás seamos Carlos y yo, pero ellos mismos ya están considerados también,
porque ya llevamos tantos años que vamos a una. Se ve que les ha gustado
seguirnos a nuestros bolos, nuestras locuras y están muy contentos, ya nos lo
dicen siempre, para ellos Vhäldemar, es como su grupo
Yo algo menos ahora, porque sí
que es verdad que me he ido a vivir un poco más lejos, ahora vivo en Burgos, y
les veo un poco menos, pero claro, como tenemos casi todos los fines de semana,
pues al final nos tenemos muy vistos. La verdad que somos una gran familia.
Carlos
Escobedo, genio y figura. Nos podrías contar tantas cosas de él después de
tantos años.
Es lo
que dices, forma parte de la identidad de Vhäldemar, su forma de ser, su forma
de moverse encima del escenario. Eso es la identidad de la banda,
efectivamente.
Pedro,
ha sido un verdadero placer esta conversación contigo. Lo hemos pasado muy
bien, hemos disfrutado mucho y bueno, a mí personalmente, como ha dicho
Alberto, me hacía mucha ilusión porque soy un gran admirador tuyo de la
guitarra y de la banda. Te mandamos un fuertísimo abrazo mío, de toda la
familia Metal Nostrum y nada volveremos a ver a Vhäldemar en la carretera y
estaremos ahí en los conciertos.
La entrevista se cortó en este punto de la conversación por un problema técnico, pero nos emplazamos para retomarla más adelante cuando haya novedades jugosas del grupo, e incluso alguna sorpresa.