head

miércoles, 28 de mayo de 2025

Entrevista Metal Nostrum: Pedro J. Monge de Vhäldemar


En esta ocasión nos ponemos en contacto con Pedro J. Monge, con el que charlamos para nuestra sección de entrevistas. Es uno de los guitarristas más importantes del metal nacional, además de fundador, compositor, productor y líder de Vhäldemar, el grupo de heavy metal fundado en Baracaldo a finales de los 90, y que sin duda es una de las bandas más importantes del panorama metalero nacional. Sentimos decir que no pudimos completar toda la entrevista debido a un problema técnico, pero también hemos quedado de volver a charlar en un futuro no muy lejano.

Pedro, te agradecemos que saques tiempo para brindarnos la oportunidad de charlar contigo esta tarde. La primera pregunta y más obvia, pero no menos importante, es ¿quién es Pedro J. Monge y cómo empiezas en este mundo de la música y formar una banda junto a Carlos Escudero?

Hola a esa gente. Saludos ahí a toda la gente. Hola, Alberto y Oscar.

Todo esto empieza cuando era chaval y gracias a mi hermano, él me sacaba ya 4 o 5 años, y siempre andaba con las guitarras, sus CDs, las casetes y eso. Ahí es cuando le cojo el gusto a la música y en especial con el rock, el metal. Empezamos intentando tocar canciones de Jimi Hendrix, de Deep Purple y poco a poco vas descubriendo otras bandas, los Judas, Iron Maiden, etc. Ahí empezó toda mi obsesión, cuando escuchaba todas estas canciones ya me imaginaba en el escenario, soñaba con eso. Poco a poco se me fue dando bien la guitarra y empecé a practicar horas y horas y horas. Empecé a meterme en locales de música con otros músicos, y ahí fue cuando ya conocí a Carlos. Al principio tocaba con mi hermano, blues y cosas así, hacíamos sesiones, jams y todo eso. En un concierto de su grupo anterior, fuimos a verle y le conocí ahí. Después de recoger todos los trastos, me lanzó un grito, él era guitarrista, no era cantante en esa época, y lanzó un grito, pero como si fuera Eric Adams, igual, igual que Manowar. Me llegó al alma y fui donde le dije: “oye, tú, tú vas a ser mi cantante”. Él respondió: “¿Cómo qué? ¿Qué dices tú?” También estaban en el local de al lado, y ya nos empezamos a reunir, les enseñé mis ideas, y de ahí sacamos nuestra primera demo, que eran cuatro temas, si mal no recuerdo, y a partir de ahí, pues ya sabéis, pues veinti... no sé cuántos años que llevamos juntos, vamos, más que en mi matrimonio.

Hablas del apoyo de tu hermano para iniciarte en este mundo, además de tu hermano, ¿alguien más de tu familia te ha apoyado?

Sí, mi padre, desde que yo recuerdo siempre había una guitarra española por casa, él tocaba cuatro acordillos, él tampoco se metió muy de lleno, pero sí que me orientó para apuntarme en el conservatorio, hice estudios de guitarra clásica, que al principio iba súper renegado, yo sólo quería mi guitarra eléctrica, mi heavy metal y mi rollo, pero ahora lo agradezco, porque al final tienes un conocimiento más claro de la teoría y que la verdad que viene bien, adelantas. No digo que sea imprescindible porque al final la música es alma y sentimiento, puedes perfectamente hacerlo sin ello, pero es una herramienta que te va a llevar a hacer las cosas con un conocimiento más rápido, no tienes que buscar. Ya sabes de cabeza, este acorde es así, esto hay que armonizar así, eso ya te viene. Gracias a mi padre es verdad que estudié guitarra clásica y también descubres cosas. De hecho en Vhäldemar me gusta mucho meter cosas clásicas de Bach, de Vivaldi y gracias a toda esta formación, también se nota

Muchas veces yo viéndoos, escuchándoos a mi memoria siempre me vienen muchos riffs de por detrás de esa época clásica de tus primeros discos.

Yo creo que Yngwie también inspiró mucho en estos clásicos y es evidente todo el sentimiento de estos compositores en su música. Siempre me gusta que suene rock, duro y esa vieja escuela de Dio, por ejemplo, pero sí que es cierto que si hay que meter un pasaje que recuerde un poquito a este aire clásico, a mí me encanta y soy súper fan de Yngwie, le he escuchado muchísimo, he tocado muchas de sus canciones, siempre que he podido he ido a verlo.

Ha hecho obras maestras. Sí que es verdad que ahora le he perdido un poco la pista, porque no recuerdo muy bien ya en qué LP, pues no sé si por él o por sus cosas de producción, ya no me gustaban mucho como suenan sus discos, ya no pilla cantantes top, o canta él, le he perdido la pista, pero no en directo, si viene en directo seguiré yendo a verlo, porque es increíble, pero sí que es verdad que sucede desde ahora, pues joder es una pena que un genio como él, no sea capaz de ir dando un buen productor o coger músicos excepcionales, no sé, él sabrá y sus cosas tendrá.

Coincido contigo, me pasa como a ti, yo sus primeros cuatro o cinco discos, a mí la mente me la tenía absorbida, yo en la época de adolescencia en el instituto, yo llevaba la carpeta forrada con fotos de él, para mí era un dios de la guitarra, y luego sí es cierto que a partir del quinto o sexto álbum, me pasa un poco lo mismo.

Es una máquina de componer, y luego la técnica y su expresividad en la guitarra son únicas. Hay muchos guitarristas que corren, pero ese feeling que tiene, no es que intente hacer, pero sí que comparto esa sensación de ese sonido Stratocaster que nace de Jimmi Hendrix y Richie Blackmore. Lo he mamado tanto de Yngwie que incluso llevaba la misma guitarra. Ahora sí que he cambiado de guitarra, quizás hasta por no parecerme tanto. No sé si tampoco quería que sea un cliché de él.

Mira, el Yngwie de Baracaldo.

Pues no, no quería eso tampoco. Pero coja la guitarra que coja me hago sonar a ese aire, porque ya te digo que Yngwie es un eslabón más, me flipa mucho Rory Gallagher, que también era de Stratocaster, Jimmy, Richie Blackmore, para mí es ese sonido lo que busco, ese strato rasgado, ese vibrato fuerte y esas escalas, pues claro me encanta. Pero no es correr por correr, Yngwie corre cuando hay que correr y cuando hay sentimiento su vibrato es demoledor, arrolla a cualquier guitarrista.

Coincido, para mí es un maestro, siempre lo será, lo llevaré de corazón, porque es mi primer idioma.

En este punto yo me callo, porque...

No digo que no haya más guitarristas, yo soy fan de muchos y me encantan, Vinnie Moore, por ejemplo, hace poco lo he estado viendo aquí en Bilbao y es de mis guitarristas favoritos Michael Romeo, Steve Vai… Pero me los imagino a todos en el escenario y si saldría Yngwie yo creo que les reventaría a todos con dos notas, para mí es lo más que hay. No obstante, ya te digo, soy muy fan de los demás

No digo que sean unos pelagatos pero a mí me supera y siempre me ha superado. Yo me quedé creo que Rising Force, no, el Trilogy.

Bueno, la primera canción, que es la de Rising Force, en mi opinión, es el mejor solo de la historia, estoy enganchado. De hecho esa canción es la que me hizo flipar con el duelo de teclistas y por eso incorporamos hace 15 años a la banda, incorporé a un teclista, porque yo quería eso, hacer un solo y que me responda el teclista, volver y tal y a raíz de esa canción fue cuando escuché ese solo.

Hablábamos de tus comienzos en la niñez y del apoyo familiar. Es muy importante el apoyo que has tenido.

Sí, claro, al final es donde te guían y si tu padre o tu hermano ya tocan y te orientan en este camino, lo tienes más fácil. También es que te guste y te llegue al alma, a mí es lo que me pasó, No quería hacer otra cosa. Es guitarra, guitarra, guitarra, es como una obsesión. A día de hoy, estoy entre guitarras, si lo veis allí, o sea, guitarras por aquí, guitarras por ahí. Eso que este es el estudio que tengo en Bilbao, que es un poco más de donde se trabaja con las bandas. Luego tengo otro estudio donde yo vivo, igual tengo 30 o 40 guitarras. Es donde acabo los trabajos de los grupos que grabamos, hay guitarras, amplificadores, pedales, y al final es mi vida y mis herramientas de trabajo.

Comentabas que de niño ya lo tenías claro, que tenías esto por dentro y querías dedicarte a la música, pero ¿alguna vez pensaste realmente en llegar al punto en el que realmente se os puede situar ahora a ti, a lo que es la banda?

Cuando eres un chaval sueñas con eso y no sabes hasta dónde vas a llegar, pero sí que es verdad que tuvimos no sé, suerte o qué. Con nuestro primer LP ya salimos, no habíamos tocado ni en un bar, fue ya directamente en la Aqualum con 600, 700 tíos, fue de repente, en el primer concierto, el sueño es una realidad. Sí que hemos tocado en festivales para muchísima más gente, pero a nombre nuestro somos una banda que eso, pues es 300/400, es un logro, más en este país. Ya sabéis que el heavy metal, está que si no son grandes festivales, un grupo fuerte incluso, hay conciertos que he metido yo más gente que los Rage, imagínate, y no lo digo por flipármela, que es que es verídico, y te quiero decir que para nosotros es un orgullo estar haciendo giras y meter gente y decir lo hemos conseguido. No hemos conseguido tocar para 14.000 a nuestro nombre, pero yo creo que pocos grupos heavy lo van a conseguir. Entonces, en nuestro nivel y en nuestra música underground, yo estoy súper contento y súper feliz. Y luego en mi opinión, lo hemos conseguido. Nos somos Iron Maiden, pero está bien.

¿Por qué la guitarra eléctrica y qué te influenció para decantarte por este instrumento?

Había una guitarra española en casa y es que la que cogía, me inventaba canciones sin saber nada, aunque fuera con las cuerdas al aire, fue como una obsesión, me llegó y ya fue escuchar los riffs como ‘Smoke on the water’, que eran cuatro notillas, y todo el rato con la cinta para atrás, para adelante, sacarlo. Luego ya fue a más un poquito a más, con Joe Satriani flipé un montón, con Steve Vai, pero te hablo de largas horas. Encima en esa época era difícil conseguir tablaturas, entonces era todo a oído, echar para atrás, rebobinar, rebobinar. Recuerdo que conseguí una pedalerita que grababa cachitos y podías ponerlo lento, te hablo del ’90, con 10/11 años. Sacando cachitos del ‘Passion for Warfare’ de Steve Vai, de Yngwie, yo lo recuerdo súper entrañable porque realmente disfrutaba de meter esas horas con el instrumento, que era la guitarra. Ahora claro que meto horas, pero ya no es lo de antes, de esa obsesión. Lo que has mamado de pequeño, ahora es como andar en bicicleta, que dicen que no se olvida. Sí que es verdad que hay que mantener, porque tampoco te puedes hacer una maratón o algo si no has practicado, pero las horas de chaval es lo que te va a marcar tu estilo.

¿Y qué te dicen en casa? Pedro, para ya con la guitarra.

Ahora vivo con mi mujer y mis dos hijas y tengo el estudio pegado, que mismamente ayer, me hizo falta una colaboración de mi hija a las 11 de la noche, llamé a la mujer, que se asome a la ventana, por favor y con el micrófono le grabé un par de frases. Vivo pegado, pero en casa sí que es verdad que ya no tengo las guitarras, mi mujer es muy maniática de decoración y no me deja poner guitarras en las paredes, pero bueno tengo el estudio pegado, que a veces voy en pijama por la calle y me meto al estudio así. Hoy me he venido a Bilbao y me he venido con mi guitarra, la que me gusta para practicar y tal y siempre voy pegado a una guitarra.

¿Cuántas horas le dedicas a diario a la práctica?

Me gustaría practicar más, pero al final ya sabes, la familia, tus hijas. Tengo hijas pequeñitas que quiero disfrutarlas mucho. Supongo que cuando ya se hagan mayores y se vayan por ahí volveré a meter más horas, pero ahora sí que me gustaría meter más de lo que meto; trabajo mucho para otros grupos de compositor, producción, masterización, mezcla, todo esto, pero fíjate que estoy haciendo grupos y tengo mi guitarra colgada, a veces el ordenador tiene que trabajar unos minutos, pues ya practico y me gusta mucho ponerme bases o mi disco y tocar por encima e improvisar, sí que siempre intento sacar por lo menos una o dos horitas para la guitarra. Sí me encantaría poder más; y luego en la época de composición de los discos y grabación, ahí meto ocho o diez horas al día, o lo que haga falta durante ese año, de unos meses que dura este proceso de composición, grabación. La verdad es que luego en los ensayos, que no hacemos tantos y ahora vivo alejado del grupo y es un poco más complicado. Pero tenemos muchos conciertos, así que al final todos los conciertos que hacemos, sirven de ensayo y lo llevamos súper machacado. Creo que la gente lo nota en el directo como le metemos bien de caña. 

Ahora hemos hecho muchísimos bolos y estamos muy compenetrados, encima esta banda ya llevamos bastantes años todos juntos, que antes siempre hemos estado que si el batería se va y viene otro, y ya llevamos unos años tanto teclista, bajista, y Carlos y yo siempre hemos estado desde el primer disco hasta ahora y por fin tenemos una banda muy consolidada, que estoy súper contento con cada uno de ellos.

Siempre dices en los conciertos que gran parte es gracias a Carlos, siempre los recalcas que gracias a él la banda continúa.

Mi labor es que siempre haya material nuevo, los discos, todo ese rollo, pero Carlos se encarga de todo, este día aquí, la furgoneta, la organización, el merchandising. Y luego la energía que tiene él al salir al escenario. Creo que si Carlos ahora me dice: Oye, Pedro, que voy a dejarlo, que soy mayor o cualquier historia que me pueda contar, tengo mis dudas de que yo cogería a otro cantante y saldría a un escenario. Igual con otro proyecto, otra historia, pero como Vhäldemar no. Creo que él es un 50% como yo otro 50%, porque al final es mi música y mi rollo, pero toda la gente que va a los conciertos, al final, se queda con él, su show, que es más bestia que... Yo creo que él es una parte muy muy importante de Vhäldemar y creo que no me atrevería a salir con otro cantante. Tampoco voy a escupirme y de repente no va a ser que lo caiga, pero no creo que se diera el caso.

Aparte de la guitarra, ¿tocas algún otro instrumento? te hemos visto como bajista.

En algún caso sí. En mis producciones y cosas de gente que me pide que les haga discos, hago todo yo, puedo tocar tanto piano, bajo, batería a un nivel muy bajito. Sí que sé lo que hay que tocar, por eso con mis máquinas y mis rollos sí que puedo llegar a hacerlo. No podría interpretarlo, por supuesto que no. Pero bueno, bajo, batería, mis coros, mis rollos también hago. Sí que me gustaría dominar un poquito más el piano y la batería. Piano he estudiado también mis cuatro años, pero no da para nada. Como no le metas horas. Y claro, me encanta tanto la guitarra que nunca veo el momento. Tengo una batería montada también, pero es lo que dices: si me llamó la guitarra es lo que me llamó. Me defiendo con el bajo bastante bien en mi estilo, pero luego no me pongas a tocar jazz o tocar cosas, creo que estoy especializado en rock, blues y heavy metal y considero que lo controlo bastante.

Además eres productor musical. ¿En qué momento decides dar ese paso?

De eso tengo una anécdota. De siempre, en el local querías grabar tus ideas, porque antes componíamos de memoria. O sea, pillamos la guitarra y chiquichiquichiqui, este viene con este riff, ahora viene el otro, a ver Carlos canta. Pues no era la manera, era bonito trabajar así, de memoria, recordar. Un buen día, mi hermano, que falleció, por cierto, hace un par de años, es una pena el hombre, nos dejó rápido. Compró un cuatro pistas, y ahí empezó todo, empezar a grabar con él, una guitarra, poder grabarme encima, y otra vez. Luego me acuerdo que hacías de tres pistas a una, tenías otra vez tres libres. Y todo esto empezó ahí, pero un día alguien de Cáceres nos invitó a grabar una canción de Barón Rojo, una cover que elegimos, la de Breakthoven, porque era la que tenía ese inicio de Beethoven, y me llamaba mucho a mí. Fuimos a conocer a Carlos Creator que era un productor de aquí muy bueno, me acuerdo que quedé solo con él, y fue llegar a su estudio, lo encendió, sonó el bombo ese que me puso ahí, fue una locura que me llegó al alma también como la guitarra, y ese mismo día le dije: Carlos, yo necesito esto en mi local, que me expliques; y me vio tanta ansia que me puso a trabajar con él. Estuve siete años con él, trabajando en los Rock Studios, y ya de siete años me vi con los conocimientos. Al final fue hacer la universidad con él, trabajando y cobrando. Por una parte muy bien, pero por otra parte mal, en referencia a mi música, porque ya te pones a trabajar muchas horas con otros grupos. De hecho eso fue entre el segundo y tercer disco que hubo unos siete años para sacar el siguiente disco. Por esa razón me metí a trabajar y muchas horas de música y vas dejando de lado lo tuyo y es una pena. Pero bueno, ahí empezó toda mi afición hasta que conseguí montarme en mi propio estudio, los Chromatic City Studios, y me vi capaz de lograr hacer producciones guapas a otros grupos.

¿Con qué grupos trabajas ahora mismo? ¿Qué grupos tienes?

Ahora mismo, acabo de grabar a Itinerum, que es un grupo que les ayudo bastante a la composición. Es un grupo de Durango. Llevan su segundo LP, este es el segundo. Estoy mezclando a un grupo más punk, Kayuko. He acabado con Segismundo y Toxicómano, también punk, de Vitoria. Tengo una lista tremenda, tendría que sacar el móvil para verlo. Estoy con Rise to Fall ahora mismo haciendo su quinto o sexto disco.  A veces tengo que coger el móvil, que tengo la carpeta de bandas y hay una lista grande. Sí que ando con algo más pero bueno más o menos eso es lo que se está grabando.

Si Carlos decidiera dejarlo, a lo mejor no serías capaz de continuar con la banda. ¿En ese aspecto habrá algún día un disco en solitario tuyo?

 Sí. A ver, me está pasando eso, que no me da la vida para tanto, pero tengo ya alguna cosa que sí que me gustaría hacer con diferentes cantantes. Por ejemplo, toda esta idea la empecé cuando Raúl, mi bajista de ahora, nos cantó una canción en el anterior disco, Straight to Hell, ‘Fear’, que era composición suya. Yo sí que arreglé, produje todo y me dejó loco cómo cantaba este hombre, ahí empecé yo un poco a rondar, voy a empezar a hacer canciones. Mi mujer es cantante también, pues me canta una mi mujer, me canta Raúl otra, conseguir cantantes por ahí, y esa fue la idea, pero se me va, porque ahora he empezado y ya estoy componiendo otra vez para Vhäldemar, sé que otro año se me va a retrasar esta idea, me gustaría que fuera ya, pero no sé, hay que esperar. Pero no tanto instrumental, va a ser un disco cantado, igual si meto un tema o dos instrumentales que tengo en mente también, pero la idea es que sea un disco cantado. Con mis ideas, otras diferentes, no encasillarme en lo que es Vhäldemar. Poder pintar como sea y que salga lo que salga, y que nadie me tenga que decir nada.

En Vhäldemar también hago lo que quiero, pero siempre estás encasillado en un estilo, que es super heavy metal, y me gustaría alguna pincelada diferente, pero a ver si llega algún día.

Sí, y lo esperaremos ansiosos para descubrirlo. Vamos a hablar un poco de Vhäldemar. Hay dos palabras que, para nosotros definen perfectamente a la banda, que sería heavy metal y el público que tanto sigue en legiones por miles en todas partes, que se relaciona claramente con vosotros, y lo de la frase de ‘a muerte’, eso es un eslogan que lleváis por bandera. ¿Qué se siente cada vez que alguien se te cruza por la calle o estás en un concierto y te dice, ‘a muerte’?

Sí, la verdad que es una sensación, vayas a donde vayas. Hay conciertos que voy a ver que es que no puedo ni verlos, ni me dejan porque hay fotos y no sé qué. Digo, pero estamos viendo a Udo o estamos viendo a no sé qué, pero disfrútalo. La gente se emociona, la verdad que nuestros son fans muy, muy, muy fans y se ve que lo flipan y claro, luego te ven y quieren hablar: “¿te acuerdas que te vi? no sé dónde”, y al final somos una gran familia, y que sepan todos que yo me acuerdo de toda la gente, no te puedo decir los nombres, pero joder, sé que, estos son de los de Castellón, estos son los de Alicante, esta gente son los de Madrid y es una pasada y sobre todo en algún festival, que vamos a  verlo y joder, entonces ahí te reúnes con casi toda España y de todos los conciertos que has hecho y es una pasada, la peña te saluda y saben que somos gente de puta madre y por eso vienen porque les damos fotos, firmas, lo que quieran, púas. Estoy de dar púas que desde que empezamos los conciertos de la primera canción a la última damos una púa. Pero porque saben que somos gente de puta madre y como sé que hay que dar 300 púas, pues se les da 300 púas. La verdad que la sensación es de ser querido por gente y es algo muy grande.

Desde un principio, las letras fueron en inglés. ¿Tenías claro siempre este tema de cantar en inglés?

Sí, lo hemos tenido muy claro, porque al final, fíjate qué grupos estoy diciendo: Deep Purple, Yngwie, Iron Maiden, Manowar, cantan en inglés. Entonces es lo que yo concibo como mi música. Cantar en castellano es que me cambia tanto. No critico ni mucho menos, no quiero decir ni peor ni mejor, pero no es lo que a mí me gusta. Yo escucho mis canciones, y creo que si las cantáramos en castellano, se desvirtúan totalmente para lo que yo tengo en mi cabeza, que es como tiene que sonar. Yo creo que el heavy metal es como escuchar flamenco en euskera, imagínate. Igual el que haya escuchado sólo eso, pues igual le gusta. Pero si has escuchado a Camarón, pues tú lo que entiendes por esa música es cantar en castellano. Pues a mí con el heavy metal me pasa que lo que me gusta es en inglés. Es lo que me llena y yo por eso quise hacerlo así también. Es para sonar a ese estilo de heavy metal, pues anglosajón, con palabras fuertes, monosílabas, y es lo que me gusta. Hay bandas en castellano que son la polla y hacen muy bien, pero no me llegan, a mí no me...

Claro, cada uno elige como quiera hacer cosas. Vuestro último álbum, ‘Santuary of Death’, publicado en el 24. Sólo se puede decir de este disco que es un hostiazo de Heavy Metal en toda regla ¿qué nos puedes decir del gran éxito y de las grandes críticas cosechadas por el disco?

La verdad es que es un orgullo hacer un trabajo y de repente ver que tiene esta esta crítica tan buena y yo estoy súper contento con este último disco. Siempre es un reto de sacar un nuevo disco y cuando vienes de algo que te están poniendo que es súper bueno, el siguiente que saques siga con mejores críticas y llega más gente, la verdad que es una pasada, yo estoy súper contento, este disco me ha encantado está repleto de temas. Es un disco que me costó al principio, hice solo una canción y luego, con la siguiente canción pasaron meses y nada, pero de repente un día, no sé qué pasó, me llegó la inspiración de no sé dónde, y lo hice seguido, en siete días compuse todas las canciones, toqué los riffs, los solos, me puse a cantar, yo suelo cantarlo en los discos, luego suelo pasar a Carlos y él saca las letras, yo canto en mi improvisación en inglés, y fue improvisado todas las melodías y todo se quedó tal cual, es que me ha salido del alma y por eso yo creo que es un disco así de bueno, porque es como muy fluido, muy improvisado y fresco. Creo que es la expresión que tienes tú a la primera, no preparar nada, sino a la primera. ¿Qué cantarías aquí? eso es lo que pasó y estoy muy contento, a día de hoy me lo pincho y flipo con él, o sea que está muy bien.

¿Ahora en qué momento está en qué momento está la banda? ¿Qué planes de futuro inmediato?

El futuro inmediato es el 29 de mayo que vamos a proyectar nuestro primer directo oficial. Vamos a lanzarlo bien editado, y lo vamos a proyectar en una sala de Bilbao, Bilborock, donde por primicia podrán adquirirlo doble CD y un pendrive con su carátula para verlo en vídeo.

Este es el primer proyecto que tenemos ya a la vista. Es el 20 aniversario que grabamos en una sala aquí en Baracaldo, que se llama BEC, y fue un éxito total. Metimos más de mil personas y fue increíble. Creo que a la gente le va a gustar el directo, suena muy bien, lo hemos mezclado aquí en los estudios y creo que el resultado ha sido bestial.

El siguiente paso que vamos a dar, que ya te he comentado antes, es que estoy componiendo ya un nuevo disco. Por ahora solo tengo dos temas y de uno de ellos haremos videoclip y lo lanzaremos lo antes posible. Y luego para 2026, antes de verano, intentaré tenerlo editado, a ver si hay suerte. No lo quiero decir abiertamente como que oficial, pero ya sabes que esto de la música a veces, pues igual pasa otro año más o vete a saber. Pero mi misión sí que es ir un poco más seguido, quiero meterle caña. Ahora estamos en un punto muy bueno y no quiero que se me duerma la gente y tampoco agobiar con un disco al año tal, pero sí que es verdad que me gustaría cada dos años tener un disco, y a ver también lo que aguantamos. El cantante, Carlos, siempre dice: “me quedan dos años buenos”. Y yo que no, Carlos, hay que darle. Yo sí que soy de los que cuando vea que flojeamos, él, yo o quien sea, no pretendo, nuestra música es muy fuerte, quiero decir que estar en esta música con 70 años, le damos mucha caña, vamos muy rápidos, muchos solos. No es como salir a tocar cuatro riffs de rock, igual la edad te lo permite. No creo que Carlos pueda cantar esos gritos todo el rato, tirarse, subirse para aquí y para allá, ya cuando veamos que es un poco lamentable el show que hagamos, no seguiremos. No creo que seamos como estas leyendas que siguen y siguen. Yo es verdad que he visto cosas que ya digo: “por favor, tío, retiraros ya y dejad bien lo que habéis hecho”. Pero también son libres de hacer lo que quieran y para adelante.

Y en directo, venís de hacer una gira bastante larga ¿Va a continuar? ¿O ahora ya el tema directo está aparcado un poquito hasta que salga el nuevo lanzamiento?

Sí, seguimos con esta gira de Sanctuary of Death. Este mes tenemos en Lleida que vamos a tocar en un festival, luego ya al verano vamos a tocar en varios festivales y seguiremos hasta noviembre. Tenemos todo cerrado ya, bastantes fechas, y espero que en Navidad ya paremos un poquito, ahí sí que me meteré un poco más en el estudio y a ver si podemos sacar este nuevo disco que te comento, por lo menos el adelanto de un single con videoclip para que se vea ya un poco lo que estamos haciendo, que por cierto me ha encantado el par de temas que tenemos hechos y prometen que va a ser un discazo.

¿Y Europa o Latinoamérica?

A ver sí que recibimos ofertas, pero una cosa por otra pues no acaban surgiendo. Los componentes de la banda trabajan de sus rollos, es complicado. Hemos hecho una gira en Japón y es complejo, no es tan fácil, hay muchas cosas que atar, muchos gastos, días en el trabajo de la gente. Es complicado dar ese salto de decir: venga estamos solo por y para. Es complicado. Y luego de dar con buenas productoras de conciertos, que no te la líen por ahí. Hay que tener todo muy atado. Pero por Europa sí que hemos hecho cosas, también hemos tocado conciertos por ahí sueltos, pero no como gira seguida, eso todavía no nos hemos organizado ninguna así seria.

Háblanos un poco la formación actual de la banda aparte de ti, Carlos a la voz e incluye al teclista Jonkol Tera, Raúl Serrano al bajo y al batería Jandro Tukutake, se percibe una gran estabilidad en este momento en el grupo.

Sin duda, estamos cinco individuos que cada uno por independiente son muy buenos todos y la compenetración que tenemos, de tantos años ya y tantos bolos juntos, sabemos todo lo que va a surgir. Individualmente, Raúl es un bajista excepcional y cantante, Jonkol es un teclista abismal, Jandro va a muerte con la batería. Creo que es el momento de esta consolidación de esta banda, es el mejor momento que ha habido, sin duda alguna. Creo que en estos siete años que hemos estado juntos, se nota, y están muy contentos también con nosotros. Al final Vhäldemar quizás seamos Carlos y yo, pero ellos mismos ya están considerados también, porque ya llevamos tantos años que vamos a una. Se ve que les ha gustado seguirnos a nuestros bolos, nuestras locuras y están muy contentos, ya nos lo dicen siempre, para ellos Vhäldemar, es como su grupo

¿Fuera del escenario os veis mucho, tenéis trato o ya llega al no te quiero ver más?

Yo algo menos ahora, porque sí que es verdad que me he ido a vivir un poco más lejos, ahora vivo en Burgos, y les veo un poco menos, pero claro, como tenemos casi todos los fines de semana, pues al final nos tenemos muy vistos. La verdad que somos una gran familia.

Carlos Escobedo, genio y figura. Nos podrías contar tantas cosas de él después de tantos años.

Muchos viajes, muchas aventuras con él. Yo le conocí creo que con 16 años, imagínate. La de aventuras y sesiones que hemos hecho y más cuando éramos chavales que estábamos todo el día tocando en el local y mil aventuras, mil conciertos con él. Es un tío excepcional. Vayas donde vayas con él, yo podría ir a cualquier parte con él. Aunque luego es un cascarrabias, siempre con su toque de humor y aunque se esté cagando en la madre que lo parió, siempre lo hace un poco. Hay gente que en los conciertos, alguna cosilla hemos tenido por ahí puntual de que alguien no ha llegado a entender cuando se insulta a la gente, cuando se mete con ellos. Es parte de su show, él es así. Y luego está encantado, baja con todos al público y vamos, no hay ningún problema, es su show que siempre le digo yo pressing catch, provocar a la gente. Creo que eso es también el show, que la gente vaya y se pase bien, no solo estar ahí, que vamos a poner cara de malos ahí, que duros somos, no, lo que nos gusta es que la gente interactúe con nosotros y vea que somos gente normal y tocamos, y hacemos lo que sea.

Es lo que dices, forma parte de la identidad de Vhäldemar, su forma de ser, su forma de moverse encima del escenario. Eso es la identidad de la banda, efectivamente.

Pedro, ha sido un verdadero placer esta conversación contigo. Lo hemos pasado muy bien, hemos disfrutado mucho y bueno, a mí personalmente, como ha dicho Alberto, me hacía mucha ilusión porque soy un gran admirador tuyo de la guitarra y de la banda. Te mandamos un fuertísimo abrazo mío, de toda la familia Metal Nostrum y nada volveremos a ver a Vhäldemar en la carretera y estaremos ahí en los conciertos.

La entrevista se cortó en este punto de la conversación por un problema técnico, pero nos emplazamos para retomarla más adelante cuando haya novedades jugosas del grupo, e incluso alguna sorpresa.

Texto: Alberto Ladero Lorente (Gritos de la Malladoura) y Óscar R. Martín (Metal Nostrum)
Fotografías: Alberto Ladero Lorente.



SEGUIREMOS GRITANDO: ¡QUÉ NO PARE LA MÚSICA! ¡QUÉ NO PARE LA CULTURA! ¡QUÉ NO PARE VHÄLDEMAR! ¡QUÉ NO PARE PEDRO J. MONGE!

No hay comentarios:

Publicar un comentario